La importancia de cerrar un ciclo
- amanecerturquesaco
- 26 may
- 3 Min. de lectura
Por: Gabriela García Espinosa

Cuando un ciclo en nuestra vida llega a su fin, ese proceso de quiebre emocional que nos carcome por dentro sin importar de que índole es, la mayoría de las veces se siente dolor, nostalgia, tristeza a pesar de que el ciclo se cierre por decisión propia; ya que perder o dejar ir algo conocido provoca emociones encontradas debido que ante una pérdida se abre la puerta de la incertidumbre, aunque como mencioné sea un cambio por decisión, lo que viene es incierto, diferente y nuevo.
Es importante saber que un ciclo es todo aquello que se compone de momentos vividos, experiencias y sentimientos tanto agradables como desagradables, a los cuales nos apegamos. El problema de esto es que muchas veces nuestra mente se queda atorada en momentos, situaciones y personas del pasado que conforman periodos a los que deberíamos decirles adiós. Es importante ser realistas y aprender a despedirse cuando ya no perteneces a ese lugar, cuando esa persona ya no te está sumando y cuando tú ya diste todo lo que estaba de tu parte y no hay reciprocidad de sentimientos.
Vivimos en una constante crítica y emitiendo juicios hacía nuestras decisiones, nos arrepentimos de lo que hicimos y lo que dejamos de hacer y nos castigamos todo el tiempo de manera injusta. Deberíamos enfocarnos en ser empáticos con nosotros mismos, en preocuparnos por nuestro bienestar. Creo fuertemente que de los errores sacamos muchos beneficios, si veo esto de manera positiva lograré evitar caer en los mismos baches por los que ya he pasado, aprenderé a valorarme más y no aceptaré compañía que no esté orgullosa de estar a mi lado.
Cerrar ciclos va más allá de olvidar una situación o de resignarnos por lo perdido, tiene que ver con el dejar ir, aceptar la pérdida y aprender para poder usar dicho aprendizaje en las nuevas experiencias y no repetir los patrones que no son saludables para nosotros.
Para poder hacerlo tengo que aceptar la pérdida y con ello que las cosas van a cambiar, nuevas vivencias, nuevas oportunidades y no será nada como antes, pero sin la visión de víctima en donde todo se ve como catastrófico, sino que la experiencia vivida me va a servir para dirigirme de una manera diferente. Es probable que al principio no se encuentre lógica y que tal vez, incluso se vea como algo injusto, pero el aferrarme solo genera desgaste y más sufrimiento.
Otro aspecto importante es aprender a reconocer las emociones que estoy sintiendo, esto reconforta ya que al reconocerlas podré tener una mejor capacidad de decisión sobre ellas, en el sentido de cómo las quiero vivir y sentir. El reconocerlas me da la capacidad de hacer cosas para que dichas emociones no me controlen y por consecuencia, no generen estragos en mi.
Poner fin a una etapa y cerrar el ciclo puede ser un proceso largo y doloroso, sin embargo, es necesario; no cerrarlo nos condena a vivir en el pasado y a repetir patrones que nos lastiman. Cuando cerramos un ciclo es posible que el recuerdo venga acompañado de emociones que nos ayuden a crecer y sin dolor. Se que cierro un ciclo cuando puedo recordar los momentos y agradecer lo vivido; entiendo la pérdida como una lección de vida que me ayudó a crecer y a madurar, entendiendo también que haber terminado esta etapa no fue un fracaso que me hace débil o vulnerable, sino al contrario, fue una experiencia que me fortaleció.
No se trata de olvidar, sino de descubrir y evolucionar para poder seguir avanzando en la vida. Cuando decido cerrarlo, de cierta manera es una pérdida, por lo que trae consigo un duelo. Para lograr despegarme por completo del sentimiento negativo, necesito vivirlo, es decir, abordar el desafío. Es normal que durante este trayecto estén presentes las etapas de negación, ira, depresión y aceptación. Este orden puede variar, todas las tenemos que aceptar ya que son completamente normales y gracias a ellas resurgirá una fortaleza impresionante. La clave será la paciencia, ya que es una transformación que requiere tiempo. Además, es importante agradecer por todo el aprendizaje recibido, esto es una actividad que debe ser una constante en mi vida.
Hoy pueda ya decir que mi ciclo está cerrado y aprendo a dar la vuelta a la página de la manera más agradecida y con una sonrisa y es momento de abrir la puerta a nuevas posibilidades… Gracias por el aprendizaje, gracias por enseñarme a que pudiese ver la grandeza que tengo… Gracias por tanto…





Comentarios